El poder abasí llegó a su apogeo. Harún (Aaron el Justo, Califa de Bagdad en el 786 dC.) atacó repetidamente Asia Menor, pero siempre, al parecer, en respuesta de alguna agresión del Imperio Bizantino. Después de una de éstas agresiones, Harún escribió una famosa y breve réplica al emperador bizantino: “He recibido tu carta hijo de un infiel, y no oirás mi respuesta, la verás”. (El Cercano Oriente, Isaac Asimov).


jueves, febrero 06, 2014

El astrólogo y el sultán


Orhan, Pamuk. El astrólogo y el sultán. Editorial Edhasa. Barcelona, 1992.

Orhan Pamuk (Estambul 1952) creció en el seno de una extensa y adinerada familia en el distrito residencial de Nisantasi, la zona alta de la capital turca. De su juventud, recuerda el autor su pasión por el mundo artístico, sintiendo una gran inclinación por convertirse algún día en un reputado pintor. Su sueño se vio truncado a los 22 años cuando se impuso la necesidad de realizar unos estudios reglados, primero, en la Universidad Técnica de Istambul, donde dejó inconclusa la carrera de Arquitectura; y segundo en la Universidad de Estambul, donde se graduó en Periodismo. 

Orhan Pamuk ha dedicado toda su vida profesional a la literatura, rechazando cualquier otro oficio u ocupación. De toda su obra sólo una novela posee carácter político, Nieve (2002), en la que describe las tensiones habidas entre las distintas facciones[1] que se arrepliegan en torno a la ciudad fronteriza de Kars, situada en el noroeste de Turquía.

Su primer trabajo fue Cedvet Bey e hijos (1982). Cabe decir, que desde entonces, su obra ha cosechado decenas de premios de reconocido prestigio por el mundo entero, especialmente en el Continente, en países como Francia, Italia o Reino Unido. El último y más importante galardón fue la concesión del Premio Nobel de Literatura en el año 2006, convirtiéndose en la segunda persona más joven de conseguir dicha distinción y el único de nacionalidad turca.

Sus libros se han traducido a más de 46 idiomas, incluyendo idiomas minoritarios como el malayo, el checo o el danés. El cómputo total de ventas supera los 7 millones de ejemplares; siendo algunas de sus obras más representativas, aparte de las ya citadas, las siguientes: La casa del silencio (1983), El libro negro (1990) y Me llamo Rojo (1998).

El astrólogo y el Sultán (1985) fue la versión española de Beyaz Kale, cuya traducción literal es “El castillo blanco”, en alusión al color de la prisión de Sadik Pasha[2], dónde el protagonista del libro es confinado en cautiverio.

El propósito de la obra no es otro que acentuar como el retraso cultural de Oriente respecto Occidente supuso el predominio de éste último, por ello el autor sitúa la obra en la segunda parte del siglo XVII, punto de partida en la supremacía de la Europa del Atlántico sobre la del Mediterráneo. 

El espíritu científico de Occidente lo encarna a la perfección un astrónomo veneciano que es apresado por el Turco. Sus rudimentarios conocimientos de medicina le sirven para medrar en su reclusión pues comparado con los galenos musulmanes rivaliza con el mismo Maimónides.  De ésta manera, sus servicios son demandados primero por los guardianes, luego por el caíd y posteriormente por el propio  Pachá de la región. 

Con la gracia de éste último, el veneciano es asignado a la dotación de fuegos de artificios cuya dirección ostenta un ingeniero local que responde al nombre de Hoja. Hoja y el astrónomo gozan de un parecido físico más que razonable, tan sólo les diferencia el hecho de qué el cristiano va perfectamente afeitado mientras que el musulmán porta una barba poblada. Pero es lo único en lo que se semejan, ya que el erudito turco se rige por principios supersticiosos mientras que el europeo ya está imbuido de la racionalidad humanista. 

El impacto que el científico causa en Hoja lleva a que éste convierta con el paso de los años en su amo. El musulmán le pedirá al cristiano que le enseñe todo lo que sabe sobre astronomía, ingeniería, medicina, lengua y demás ciencias occidentales. Petición a la que accede el esclavo para ganarse la confianza de su señor, porque alberga esperanzas de que su afecto le brinde algún día la anhelada manumisión. 

Mientras más aprende Hoja del veneciano más rápido se desmorona su mundo, comprendiendo que es sólo cuestión de tiempo de que Ellos (los cristianos) impongan su hegemonía mundial. Todo sus intentos por traer la racionalidad a la Corte de Estambul se verán frustrados por su pueblo y sus gobernantes, que seguirán rigiéndose con leyes arraigadas en la costumbre y la irracionalidad. Prevé amargado como los días del Imperio Otomano llegarán pronto a su fin y él no dispone de los medios para evitarlo. 

La dirección opuesta es la que toma al científico veneciano, cuya privación de libertad le empuja a dejarse seducir por la opulencia del modus vivendi oriental, embelesado por las lisonjas hacía su persona y por los placeres veniales. Hoja y el veneciano se percatarán de que es imposible recuperar sus vidas y con el intercambio de  sus prendas asumirán también el lugar del otro en el mundo.

Los aspectos biográficos han sido consultados en el sitio oficial del autor: http://www.orhanpamuk.net/


[1] Islamistas, laicos, soldados y nacionalistas turcos y kurdos.
[2] Situada en el estambulita barrio de Gálata, al Norte del Cuerno de Oro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario